Favor de no arrojar basura, entre un starbucks y dios

Me encuentro en el aeropuerto de la Ciudad de México...pernoctando junto a un nuevo buen amigo que se dirige a Vancouver y algunos cuantos humanoides más que esperan, al igual que nosotros, la llamada a su vuelo internacional. ¡Mierda! No puedo recordar mi contraseña en prodigymovil y el internet local realmente apesta...a conformarse con unas cuantas migajas en el tercer mundo...

Por lo pronto reviso la documentación oficial para el festival de cine de mar del plata -en el que seré jurado por parte de SIGNIS durante los próximos 11 días- y uno que otro grito de auxilio cibernético de mis compañeros de trabajo...

Matar las horas será un gran reto...pero ya estoy muy bien acomodado en mi trinchera...exactamente entre el puesto de venta de taco inn y dunkin' donuts...lidiando con las redes inalámbricas y la mezcla de razas, orígenes y destinos de mis demás cohabitantes...y un letrerito encima de mí, montado sobre una columna de concreto gris, que dice "favor de no arrojar basura".

En el vuelo nocturno de Torreón a México, viendo la noche caer y las galletitas llegar en manos de una aeromoza más que amigable, opté por ver en mi iPod uno de los videos que descargué ayer mientras veía, acompañado por una linda y taciturna luna de ojos verdes el estreno de la nueva temporada de LOST...lo ví por lo menos cinco veces en el recorrido aéreo y confieso que en el lapso de espera de mi salida a Buenos Aires lo he visto al menos otras tres más....y más que ver lo importante ha sido escuchar...

No había visto últimamente algo tan bien producido desde la primavera de 2006 en que me obsesioné con TRUSTED COMPUTING de LAKFON. He aquí mi nueva obsesión: